Entrevistamos a Arantxa Cobos, Experta en Coaching, docente en Formación Universitaria, nos habla sobre Transhumanismo.
- Coaching, inteligencia emocional y programación neurolingüística, ¿qué beneficios tienen?
El coaching permite desarrollar procesos de cambio de forma efectiva. Estos cambios se pueden producir tanto a nivel personal como profesional. Permiten definir un objetivo, y poner encima de la mesa los pros y contras para conseguirlo, los recursos que se tienen (tanto internos como externos).
Pero, ¿cuántas veces queremos conseguir una meta, y lo dejamos en mitad del camino, o ni siquiera empezamos? El coaching favorece el compromiso de las personas con aquel objetivo que quieren conseguir y les ayuda a identificar las causas que les han llevado a boicotear sus propias metas.
La inteligencia emocional permite conocer, identificar y gestionar las emociones que sentimos y que sienten otras personas. Todas las personas sentimos emociones, y cuando se trata de alguna que no nos gusta intentamos evitarla. En cambio, esas emociones nos están dando información sobre algo que está pasando. Por ejemplo, cuando estamos enfadados suele ser porque sentimos que hay algo que es injusto. Pero en lugar de entender qué es lo que se considera injusto e intentar comunicarlo, nos sentimos atrapados por nuestras emociones.
Afortunadamente en las organizaciones cada vez se habla más del impacto que el clima emocional tiene en las mismas.
La programación neurolingüística permite abrir la mente al conocer el impacto que las experiencias anteriores producen en cómo sentimos lo que pasa en el presente. La PNL es una herramienta que nos ayuda a entender cómo la gente capta la información, el impacto del lenguaje que utilizamos, y favorece la conexión con nuestros recursos internos para poder llevar a cabo las metas que nos planteamos.
- ¿Por qué está de moda su aplicación en empresas?
Porque se están mostrando como herramientas muy útiles a la hora de mejorar la eficacia de las personas y de las organizaciones. Permiten resolver situaciones teniendo en cuenta que los profesionales son personas. Y como personas sienten emociones, miedos, boicoteos, etc.
- ¿Qué salidas profesionales tiene estudiar coaching, inteligencia emocional o programación neurolingüística?, ¿es una profesión de futuro?
Es la formación complementaria ideal para las personas que se dedican a ámbitos como: rrhh, educación, deporte, organizaciones, formadores, coaching, directivos, etc.
Es una profesión con mucho futuro, dado que el entender las emociones y utilizarlas de forma favorable es algo que no pueden realizar los robots. Y si algo siguen teniendo las personas son emociones. Las escucharan o no, pero las tienes. De hecho, el no darles su espacio hace que las personas se sientan menos a gusto con su vida.
- Háblanos de alguna experiencia profesional que te haya marcado.
Hay muchísimas, me parece difícil resaltar solo una. Pero destacaría, los trabajos realizados con una ONG, favoreciendo el empoderamiento de personas en situaciones complicadas. El cómo favorecer que las personas dejen de sentirse víctimas por las situaciones complicadas que están viviendo y comiencen a tomar acción y decisiones. Consiguiendo metas que apenas 6 meses antes eran un imposible.
Otra experiencia que me gustaría destacar fue con la Selección Olímpica de Hockey Femenino en su camino de preparación de los Juegos Olímpicos de Rio 2016. El poder de la mente y de la emoción en entornos tan exigentes.
- ¿Qué consejo le darías a tus alumnos de Formación Universitaria antes de que salgan al mercado laboral?
Que vivan el proceso en sí mismos. El Máster va a facilitar que eso ocurra. Así cuando trabajen con otras personas, entenderán lo que está pasando y mostrarán más empatía por el proceso en las otras personas.
- Como docente experto de Formación Universitaria qué tipo de actividades o materiales desarrollas para los alumnos.
Soy Docente Experta en los Masters “Consultor Transhumanista Coaching, Mentoring, PNL, Inteligencia Emocional” y “Desarrollo Directivo para líderes”.
Mi papel es el de acompañar y favorecer que los estudiantes desarrollen las competencias que se imparten, que integren los aprendizajes. Que no solo se queden en lo teórico, sino favorecer la práctica y la vivencia en primera persona.
